Internet ha transformado los modelos de negocio y las formas de ponerlos en marcha. Gracias al crowdfunding podemos conseguir el apoyo económico de un amplio número de micro-inversores que nos ayuden a financiar las primeras fases de un proyecto social o empresarial.
La palabra “crowdfunding” significa financiación masiva. También recibe los nombres de micromecenazgo y financiación participada, entre otros. La idea básica es que a través de Internet -normalmente con la mediación de una plataforma especializada- podemos dar a conocer nuestro proyecto, atraer el interés de potenciales inversores y conseguir que aporten financiación a cambio de algún tipo de recompensa.
Es una forma de conseguir apoyo financiero tanto a proyectos que han encontrado una oportunidad de mercado para generar beneficios económicos, como a proyectos cuya orientación tiene un carácter más social en el sentido de poner en práctica ideas que pueden dar respuesta a demandas sociales relacionadas con el medio ambiente, la salud, la educación, la cultura, la igualdad o la inclusión social, por ejemplo.
El hecho de que los proyectos tengan una motivación social no significa que no puedan ser rentables; simplemente, el punto de partida no es tanto la oportunidad de conseguir un beneficio económico a corto plazo, como dar respuesta a necesidades socialmente sentidas. A menudo, se trata de conseguir que un proyecto con orientación social acabe encontrando una vía de mercado que contribuya a hacerlo sostenible.
Las emprendedoras y los emprendedores sociales tenemos en el crowdfunding una oportunidad para conseguir apoyo económico a proyectos a los que, de otro modo, costaría más encontrarles financiación tanto pública como privada.
Existen muchas personas dispuestas a apoyar el desarrollo inicial de buenas ideas sin que su motivación principal tenga que ser, necesariamente, conseguir un alto nivel de retorno económico. A veces, la satisfacción moral de haber contribuido a un bien social es suficiente; aunque eso no quita para que, además, podamos ofrecer incentivos adicionales, como tener prioridad en acceder a determinados productos o servicios, obtener invitaciones, descuentos y/o promociones, etc,, ofreciendo la recompensa más adecuada a la naturaleza del proyecto.
Existen distintos tipos de crowdfunding y de recompensas, además de un amplio abanico de plataformas, nacionales e internacionales, a través de las cuales impulsar proyectos. Eso sí, es importante tener el proyecto bien pensado y planificado para que el crowdfunding sea una opción eficaz.
En este sentido, si necesitas conseguir financiación alternativa, desde el proyecto EFES se pone en marcha un programa de formación y asesoramiento en Crowdfunding dirigido especialmente a proyectos de emprendimiento social. Más información en https://proyectoefes.es/programa-de-crowdfunding/
EFES es un proyecto aprobado en el marco del Programa Interreg V-A España-Portugal (POCTEP) 2014-2020, cofinanciado en un 75% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).